Una de las razones por las cuales decidimos lanzarnos a viajar en furgo fue el hecho que nosotros le damos una gran importancia a la conexión de los niños con la naturaleza. Aunque no vivimos en la gran ciudad, sino en un pueblo, no queremos que nuestros hijos se acostumbren a los patios de cemento, ni a jugar en parques sin arena.
Ofrecerles una reconexión frecuente con la naturaleza es esencial para nuestro modo de ver… no queremos alejarnos de ella, sino interactuar y relacionarnos con ella, respetándola. Porque cuando lo hacemos suceden cosas maravillosas!
Y es que cuando viajamos en la furgo casi no llevamos juguetes convencionales (solo cuentos, libreta y colores, y una pelota), para ahorrar espacio, pero básicamente para que investiguen y para provocar que jueguen interactuando con los elementos que les ofrece la naturaleza: piedras, conchas, hojas, troncos, arena, rocas, corteza, fuego, agua…
Según Catherine L’Ecuyer, «la naturaleza es la primera ventana de asombro«, por ello debemos recuperar la sensibilidad y el asombro que tenemos de forma innata y que hemos ido perdiendo por las circunstancias de una vida frenética y consumista, de esta forma sabremos reconocer la Belleza que nos rodea.
Fomentando la creatividad en la naturaleza
La naturaleza es el mejor aliado de cualquier niño, por ello vale la pena fomentar la creatividad para que nuestros hijos sean futuros pensadores críticos que respeten el medio ambiente y su entorno natural. Pero ¿cómo hacerlo?
– Respetando el juego infantil, dejando que tengan tiempo libre para desarrollar su propia imaginación.
– Ofreciendo un entorno inspirador y experiencias habituales de interacción con la naturaleza.
– Estimulando el juego libre, sin dirigirles.
Cuando dejas que los niños jueguen libremente con los elementos naturales suceden cosas maravillosas… fijaros cómo crean sus pequeños mundos, inventan historias, etc. etc.
El land art
Lo curioso es que hace poco descubrí que las pequeñas obras que hacen los niños cuando juegan en el exterior tiene un nombre: «land art», o earth art, una corriente de arte, divertida y enriquecedora para los niños, en la que la naturaleza toma el protagonismo.
El Land art es una corriente del arte contemporáneo que utiliza materiales de la naturaleza así como el marco del paisaje natural para desarrollar sus obras artísticas.


Os enseño algunas fotos con ideas inspiradoras que he encontrado navegando por la red, por si queréis probarlo con vuestros peques, creo que merece la pena!
Mi consejo es que os escapéis cuánto más mejor a la montaña o a la playa, para ofrecer a vuestros hijos el contacto directo con la naturaleza. Y sin guiarles, sin darles instrucciones dejad que se muevan y jueguen cómo quieran, ya veréis que espontáneamente, poco a poco, encontrarán la inspiración! Será muy beneficioso para ellos, tanto por las relaciones de cooperación, respeto y unidad de acción que se crean entre ellos (amigos, hermanos), sino también por la relación que establecen con el medio ambiente.
Se trata pues de un juego libre y totalmente desestructurado, que aporta un gran valor en su desarrollo y que debemos potenciar al máximo!
Hasta la próxima 🙂
Molt recomanable el llibre de heike freire , també.
Me gustaMe gusta
Sí, el tinc a la llista de pendents! He llegit molts articles seus i també segueixo el blog. Gràcies!
Me gustaMe gusta